Tweet

La sed es una necesidad fisiológica que con el tiempo ha sido saciada con diferentes bebidas ajenas al agua, desde el exquisito café, al vino que en porciones moderadas también beneficia nuestra salud.
Las bebidas como el refresco, el alcohol, energetizantes y con colorantes artificiales nos aportan calorías y toxinas que afectan el organismo de manera alarmante, además de aumentar en la población sobrepeso, obesidad mórbida y peligro de contraer diabetes.
El agua es el componente principal de los seres vivos. De hecho, se pueden vivir semanas sin alimento, pero sólo se sobrevive unos pocos días sin agua, imagínense el daño que le hacemos a nuestro organismo cuando lo privamos de este vital líquido, que además constituye el 60% del ser humano. La tierra y el hombre están hechos de agua, pues esta se encuentra en el interior de nuestras células y el resto circula por nuestra sangre y baña los tejidos, por lo que de esta manera llegan los nutrientes a nuestro organismo y se encarga de retirar lo que nos hace daño, asegurando además, una saludable digestión.
Ahora que sabemos los beneficios del agua consideremos el daño que hacemos al organismo cuando nos privamos de ella: falta de limpieza en el cuerpo, mala digestión, daño a los riñones, daño a la vejiga, mala absorción en los pulmones y poca actividad cerebral, pues el oxígeno que esta contiene, ventila el cerebro y lo ayuda a reactivarse.
La Secretaría de Salud de México, evidencia cie...