El sarro dental es una placa amarillenta formada por sales minerales, restos de alimentos y otros residuos que facilitan el crecimiento de las bacterias.
Se caracteriza por tener una textura rugosa que, al deteriorar el esmalte que protege los dientes, facilita la formación de manchas y capas de desechos difíciles de remover.
Lo más preocupante es que, al no controlar su crecimiento, puede incrementar la liberación de sustancias ácidas y microorganismos que provocan caries y otras infecciones orales.
Por esta razón es primordial prestarle atención, reforzando los hábitos de higiene bucal y empleando algunos remedios naturales que facilitan su eliminación sin provocar agresiones en las piezas dentales.
En el siguiente espacio queremos compartir 6 buenas opciones para que no dudes en probarlas ante la primera señal de este problema. ¡Apunta!

1. Clavos de olor

Los aceites naturales que contienen los clavos de olor son ricos en compuestos antibacterianos y antimicóticos que ayudan a prevenir las infecciones asociadas con el sarro dental.
Su uso regular detiene la formación de placa, sangrados y malos olores bucales.
Ingredientes

½ cucharadita de clavos de olor (3 g)
1 taza de agua (250 ml)

Preparación

Incorpora los clavos de olor en una taza de agua hirviendo y déjalo reposar 20 minutos.

Modo de uso

Realiza buches con la bebida durante un minuto, 2 o 3 veces al día.

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