La persona narcisista es aquella que se admira de forma excesiva, que se cree superior a los demás, tanto que siente que el mundo gira en torno a ella.
Muchas personas consideran este rasgo tóxico, pues el narcisista ve a los demás como objetos, no como seres humanos.

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Esto ocasiona muchos problemas en las relaciones interpersonales, pero ¿cómo lo ve una persona narcisista" ¿Es posible encontrar el equilibrio en este atributo"
Una cualidad con sus luces y sus sombras

El rasgo narcisista nos enseña muchas cosas, tanto para bien como para mal. Las personas que lo poseen se preocupan mucho por ellas mismas, son egoístas y se enorgullecen de cómo son.
Sin duda alguna, la autoestima no es algo que pueda verse afectada, pues la confianza que en ellas mismas tienen es muy poderosa. Estas características, en su justo equilibrio, podrían resultar una grata enseñanza para todos. Pues, ¿verdad que solemos pensar antes en los demás que en nosotros mismos" ¿A que nos sentimos mal por ser egoístas"
Nos han enseñado que pensar en el prójimo es lo ideal, sin embargo debido a esto nos rompen el corazón, nos destrozan la autoestima y nuestra felicidad termina transformándose en sufrimiento.
En cambio, los narcisistas saben priorizarse, sienten orgullo por su forma de ser y no desean transformarse en otra persona diferente. Asimismo, piensan siempre en su bienestar primero.

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