Hablar de maquillaje mineral es hacer referencia a aquellos productos cosméticos que están fabricados con minerales naturales de la tierra, como el óxido de zinc, el óxido de hierro, el dióxido de titanio y la mica. Son fórmulas más ligeras que las convencionales, libres de conservantes, perfumes y otros irritantes.
Han revolucionado el mercado beauty, ya que se promocionan como una alternativa orgánica y segura para el embellecimiento y el cuidado de la piel. Si bien su aplicación es una práctica antigua, hace apenas algunos años que se posiciona como una opción idónea para pieles sensibles y secas. Veamos sus ventajas.
El origen del maquillaje mineral
El maquillaje mineral fue comercializado por primera vez en 1976, promovido por la química cosmética Diane Ranger, quien fundó la marca Bare Escentuals. En ese entonces, Ranger vio la necesidad de crear productos más naturales, libres de emulsionantes, colorantes, talco, alcohol, perfumes y conservantes. Sin embargo, los minerales molidos se han empleado desde la antigüedad en lo que tiene que ver con la decoración y el adorno. El ejemplo más claro son los ojos bordeados de kohl de Cleopatra, aunque se cree que su uso se remonta a mucho más atrás.
Luego de cuatro décadas desde su lanzamiento, este tipo de cosméticos han ganado un lugar muy especial en el mercado. Se distribuyen en diferentes presentaciones y marcas, destacándose como una de las opciones favoritas tanto de usuarios como de dermatólog...